Las cajas fuertes son elementos de seguridad que se deben cuidar correctamente para garantizar que cumplen con su labor, de manera que en esta ocasión vamos a hablar acerca de qué hacer cuando una caja fuerte de empotrar ha sufrido desperfectos, lo que permitirá estudiar el modo en el que debemos proceder para hacer frente a los desperfectos más comunes que se pueden producir a lo largo de su vida útil.
La importancia de arreglar la caja fuerte de empotrar cuando ha sufrido desperfectos
La caja fuerte tiene el objetivo de proteger el contenido que guardamos en su interior, lo que significa que si presenta algún tipo de desperfecto, no nos va a ser de utilidad.
En caso de que una caja fuerte presente una avería, generalmente se podrá reparar sin demasiados problemas, pero es muy importante que nos aseguremos de su correcto funcionamiento tras la reparación, ya que esto va a ser determinante no sólo para evitar el robo de nuestras pertenencias, sino para poder acceder a ellas con total normalidad.
Desperfectos más comunes en las cajas fuertes de empotrar
A continuación analizamos cuáles son los desperfectos caja fuerte más habituales que pueden sufrir las cajas fuertes de empotrar:
Rotura de la caja fuerte
Las cajas fuertes han sido construidas para tener una vida útil muy larga, y sobre todo, para garantizar la resistencia ante cualquier circunstancia.
Sin embargo, esto no quiere decir que con el paso del tiempo se pueda producir algún mal funcionamiento, lo que denominamos como rotura de la caja fuerte.
Este se puede mostrar de diferentes maneras, ya sea que no cierra adecuadamente, da problemas a la hora de abrirla, las bisagras o alguna de ellas presenta un funcionamiento inadecuado, etcétera.
En estos casos, lo más normal es que podamos encontrar repuestos de la o las piezas que se hayan deteriorado o desgastado, con lo cual, con una inversión muy pequeña, podemos seguir utilizando la caja fuerte durante muchos más años.
Desperfectos por inundación
Las inundaciones pueden llegar a afectar muy negativamente a nuestras propiedades, razón por la cual también existen cajas fuertes diseñadas para evitar la entrada de agua en caso de que se produzca esta catástrofe.
Una caja que sufre desperfectos por una inundación, perderá parte de su función si se trata de una caja fuerte estanca, mientras que si es una caja fuerte normal y le entra agua, no sólo se puede dañar el contenido, sino también algunos elementos de la caja como los sistemas electrónicos o incluso las cerraduras si la inundación viene acompañada por barro u otros restos.
En estos casos, lo mejor es contactar con un especialista en la reparación de cajas fuertes, ya que se encargará de detectar todas las posibles anomalías que se hayan podido producir para repararlas.
Caja fuerte e incendios
Este es un caso similar al anterior, aunque en lugar de agua, la caja se ve afectada por el fuego.
Si es una caja ignífuga, deberá mantener sus propiedades para seguir protegiendo frente a las altas temperaturas y la entrada de fuego en su interior, y si es una caja fuerte normal, también se puede haber visto afectada de diferentes maneras, incluyendo la cerradura y sobre todo las partes electrónicas.
De nuevo se recomienda contactar con el técnico de reparación para analizar si la caja fuerte sigue siendo válida.
Golpes fuertes y fuerza bruta
Si alguien ha intentado abrir la caja fuerte de empotrar, lo normal es que presente golpes fuertes y daños provocados por el uso de fuerza bruta.
Esto implica palancas, sopletes, uso de elementos que pueden haber estropeado la cerradura, etcétera.
Si el intento ha sido prolongado, es muy probable que ya no se pueda arreglar caja fuerte o la reparación sea excesivamente cara, pero de cualquier manera, hay que estudiar cada caso de forma detenida.